lunes, 28 de septiembre de 2009

Que sepa abrir la puerta para ir a jugar

Al ver (y conocer) a maestras jardineras, no puedo dejar de pensar (y afirmar) que en su interior sostienen una interminable lucha entre la más absoluta ternura y la más absoluta locura.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

una pacieeeeeenciaaaaaaaaaaa y unos dolores de cabeza que se desquitan cuando llegan a casa bailando como "chaquira" en la terraza en bolas

La Furia de la Negra dijo...

La locura la adoptan despues de ejercer tantos años!!! Los pibes las desquician!!

Unknown dijo...

mas locas que tiernas.

tulum dijo...

Putas. Son todas putas.

Luli dijo...

Tiernas, locas y putas.




¿A qué no sabés cuál es mi título terciario?

Cielo Violeta. dijo...

Mmmm... locas y eternas niñas, diría yo.

Tiernas no, putas sí. Pero eso es normal en todas las profesionales (y en las no profesionales también, kakakaka).

HerNo dijo...

Hola, acá se puede decir la palabra "putas" gratis?
Bueno, Putas! Putas! Putas!

Saludos.

Anónimo dijo...

Y que en cualquier momento sale a la luz esa lucha y ahi...agarrate!

La Criatura dijo...

che, che, che, se están corriendo del tema, acá nadie pone en tela de juicio que las pobres maestras jardineras que se llevan toda mi admiración sean todas putas

pst, qué barbaridad, habrase visto che...

Sil dijo...

Y la más absoluta estupidez.

Y mi maestra de jardín de infantes era mala, además.

matilde dijo...

es segura q alguna mato a un nene alguna vez.

besoo

La Ruiva dijo...

En las casas tratan mal a sus hijos, siempre me imaginé eso.
Y las que no tienen no quieren tener.

Y algunas salen a matar gente por las noches.

La Criatura dijo...

debo admitir que me sorprende el nivel de ensañamiento que existe hacia esas pobres muchachas que ponen el corazón para su vocación...

asi estamos, mirta, asi estamos