viernes, 26 de diciembre de 2008

Peleador callejero

Viendo ésta viñeta en lo de Perse, esperadamente volvió aquél dilema que se llevaba toda mi frágil existencia (aunque sea por un ratito) como capo jugador de vicios y fichines: ¿Ryu o Ken?


Pero claro, después de clavarme un juguito y un paquete de semillas de girasol, era fácil volver a decidirse por...

¡Blanka! ¡Vení a tocarme que me electrifico y te quemo hasta las pelos de los huevos, puto!

1 comentario:

Natiii dijo...

Priiii


Ah, no sé. Yo jugaba al mortal kombat y no lo traicionaba por otro... jajaja